Alubiada Burgos MTB

Con motivo de la proximidad del fin de año y ya que durante todo el verano ha sido casi imposible la reunión de todos los integrantes del grupo, dispusimos la fecha del 16 de Noviembre para la ya obligada alubiada, donde después de una ruta nos juntamos todos para comer uno de los platos típicos de Burgos, olla podrida. Ya es el tercer año consecutivo que la celebramos y que mejor manera que dando la bienvenida a varios integrantes mas del grupo que a lo largo del año se han animado a salir con nosotros y que se han enfrascado en esta aventura que es el Burgos MTB. Todos los comienzos son difíciles pero con ganas e ilusión todo se hace más fácil. 
La fecha se va acercando y durante la semana amenaza para el día en concreto nieve. Y así fue, las previsiones meteorológicas fueron acertadas y al levantarnos vemos un manto blanco que hace que la ruta se coja con mas ganas. Se ha quedado a orillas del río Vena a las 10 de la mañana, en la que la temperatura ronda los 0 grados y un leve aire gélido corta nuestras caras. A la hora y al lugar en concreto nos vamos dando cita los aguerridos valientes dispuestos a pasar una agradable mañana y sobre todo disfrutar, que de eso se trata. Después de unas fotos nos ponemos en marcha para ir entrando en calor por las calles de Burgos. Llegamos a la fuente del prior donde comenzamos a subir en dirección a la cartuja. Comenzamos a ver los piques sanos entre compañeros y es que en el ambiente se nota la camaradería y el buen rollo pero no entramos en el juego que uno ya se hace mayor para estar esprintando. 
Bajamos a Fuentes Blancas donde vamos serpenteando entre los árboles buscando el camino que nos sube hasta el pinar. Todo a nuestro alrededor está tapado por un manto de nieve. Las pistas por las que vamos están limpias y son estas las que nos hacen pasar por un centro de adiestramiento de canes y seguidamente a cruzar por debajo de la autovía. En unos minutos nos encontramos en dirección a campo abierto pasando por la zona de fuendorada. Es aquí cuando el viento nos empieza a golpear con fuerza acompañado de un frío glacial. Es así cuando una vez ascendido pon una leve subida llegamos a una zona de molinos. Bien abrigados y encogidos por el frío vamos dando pedales sorteando grandes charcos de agua y con el viento en contra y así nos lleva a pasar por Carcedo de Burgos. 
Tras rodar unos metros por carretera nos desviamos en un cartel para coger así el sendero de los andasusos, marcado con sus franjas paralelas y horizontales de color blancas y amarillas, las que nos indican que estamos en un PR o ruta de pequeño recorrido. Nos adentramos en la senda y es parada obligada para hacernos unas fotos rodeados de tal bonito y nevado entorno. Pero pronto empezamos a notar  el frío de nuevo y nos ponemos en marcha. Después de disfrutar de lo bonito y divertido del sendero salimos otra vez a camino ancho y en perfectas condiciones para rodar. Es así de esta manera donde llegamos a la cota mas alta del dí y desde aquí comenzamos a descender por un camino con bastantes piedras y grava hasta Modúbar de la Cuesta, donde nos detenemos a comer un poco.
Pronto nos ponemos en marcha de nuevo todos en pelotón para llegar así a las inmediaciones de Modúbar de la Emparedada donde encaramos la última subida del día para evitar el dichoso túnel. Cada uno sube a su ritmo y así en unos minutos llegar a la vía verde que nos llevará a todos hasta Burgos de nuevo. Donde una vez llegados vamos dejando a compañeros, cada uno para su destino con los que en unos minutos nos veremos de nuevo degustando tal suculento manjar en la mejor compañía posible.
Gracias chicos por hacer posible que el espíritu del Burgos MTB perdure y seguir adelante con el objetivo que nos hemos marcado. Este ha sido el tercer año que celebramos tal evento, espero que no sea el último y que lo podamos celebrar todos los años.

Fecha:  16 de Noviembre de 2013.
Distancia:  38 km.
Desnivel acumulado subiendo:  380 metros.
Tiempo empleado:  3,10 min.(incluye paradas).
Dificultad física:  Baja.
Dificultad técnica:  Baja.

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*--ÁLBUM DE FOTOS.

Santuario de Santa Casilda

Teníamos en mente el hacer esta ruta desde el año pasado, pero como siempre lo vas dejando atrás y al final la dejas en el saco de las rutas posibles hasta que alguno salte alguno y se decida el hacer. Pero como esta ruta nos pasa en otras tantas, las comentamos pero luego las dejamos a un lado y hacemos otra diferente. Pero esta vez no, esta vez tenemos que ir hasta allí con el agravante que la ruta la haremos desde la misma capital burgalesa sin necesidad de tener que desplazarnos con el coche a ningún lado. Pronto comenzamos con los preparativos de la ruta para saber mas o menos por donde vamos a ir, ya que gran parte de la ruta son zonas desconocidas para todos, salvo algún tramo de camino. La maquinaria se pone en marcha y se va decidiendo por donde vamos a ir hasta que se va acercando el día de  la ruta.
Llega el sábado, y nos hemos juntado a la altura del barrio de G-3, 4 valientes dispuesto a disfrutar de una agradable jornada de bicicleta. La mañana es fría, ha caído algo de escarcha y las temperaturas son bastante bajas, pero nuestros ánimos están muy altos. Comenzamos a dar nuestros primeros pedales de la ruta una vez reunidos por las cercanías de la estación de trenes Rosa de Lima, y comenzamos a subir. Vamos ascendiendo hacia el pinar que hay por encima del túnel de la circunvalación. Las piernas van cogiendo calor, el corazón late con fuerza, los pulmones inhalan aire frío y nosotros en un abrir y cerrar de ojos llegamos arriba. Pronto cogemos ritmo, la ruta sabemos que es larga y no nos queremos demorar demasiado. Por caminos y pistas sin mucha complicación llegamos a la carretera por la que nos dejamos caer y así llegamos a pasar por las calles de Riocerezo.
Sin detenernos seguimos adelante por una pista de buen firme y nos vamos encontrando a nuestro camino algún leve repecho el cual se solventa con facilidad. Después de una pequeña subida llegamos a un páramo de tierras de cultivo y es aquí cuando nos empezamos a dar cuenta que el aire nos es favorable y que si sopla con la misma fuerza para volver, lo pasaremos verdaderamente mal porque nos golpeará de cara. De momento no pienso en ello y sigo adelante. Llegamos a un granja de vacas la que rodemaos y nos ponemos a subir de nuevo. Esta zona que desconocía por completo se encuentra entre bonitos robles los cuales nos rodean y dan cobijo al aire que por momentos se torna fuerte aunque siempre es favorable. El grupo va unido y pronto nos encontramos en una verde pradera la que nos lleva a pasar por un punto geodésico, donde nos detenemos para inmortalizar el momento. Nos encontramos en el Alto de la Novilla. La parada es muy corta, el aire frío hace que pronto volvamos a nuestras monturas y seguimos hacia delante. Minutos mas tarde y tras un descenso un tanto complicado por la gran cantidad de piedras en el camino llegamos a la pequeña localidad y casi sin movimientos de Caborredondo, donde buscamos refugio para comer algo y así descansar al abrigaño. 

Salimos con las pilas cargadas y nos ponemos a dar pedales. Esta vez por una carretera estrecha y de mal firme. Siempre es de agradecer en una ruta tan larga el poder avanzar algún pequeño tramo por carretera para comer kilómetros. Tras 4 kilómetros rodando tranquilamente nos desviamos a una pista y comenzamos a descender pero con un leve porcentaje. Así llegamos a el pequeño pueblo de Haedo de Bureba, donde nos encontramos que el camino a seguir está tapado con maleza y se hace casi imposible continuar. Decidimos hacer campo a través e ir por una tierra de girasoles en dirección hacia donde nos manda el gps. Estamos atascados pero vamos haciendo metros aunque sean por demás. A lo lejos divisamos una localidad y nos damos cuenta que es por ahí por donde debemos de continuar, así que a bajar como podemos por la montaña hasta coger de nuevo pedal y pasar por el pueblo que veíamos. Estamos en San Pedro de la Hoz, un bonito lugar a orillas de un arroyo que da color a este valle. Seguimos la carretera para de nuevo comenzar a ir ascendiendo y así llegar a Buezo donde empezamos a visualizar nuestro objetivo el cual da nombre a la ruta. Poco a poco seguimos adelante visualizando el lugar, completamente desconocido para mi, serpenteamos como lo hace la carretera hasta que llegamos al Santuario de Santa Casilda, donde visitamos la cueva del ermitaño, la tumba y nos acomodamos a refugio para comer algo después de haber tirado unas cuantas fotos. 
Salimos con las fuerzas renovadas pero pronto nos damos cuenta de que va a ser todo un calvario el llegar a casa. Un fuerte aire como era de esperar nos golpea con virulencia. Pronto nos agrupamos los 4 para ir intentando hacer abanicos al ir por pistas. Pero todo se acaba y nos desviamos a un camino que por suerte nos refugia un poco y nos da una tregua. Adelantamos a dos personas que como nosotros  han salido a dar unos pedales y al desviarnos del camino por el que vamos todo se pone cuesta arriba de nuevo. Estamos aliviados aunque sea por un rato ya que el aire no nos molesta, todo ellos debido a que estamos entre encinas y nos protege de el, pero pronto llegamos arriba a todo un páramo para nosotros. Juntos seguimos adelante en una bajada rápida la que nos lleva de nuevo a un bonito y verde prado donde se hace difícil dar pedales. Las fuerzas comienzan a flojear, estamos haciendo un esfuerzo extra con el aire, ráfagas muy fuertes nos golpean de pleno y es así cuando otra vez y tras una pequeña subida nos encontramos en una páramo. Descendemos por asfalto hasta las inmediaciones de la ermita de Santa Marina, pero esta vez no nos desviamos para visitarla y continuamos el viaje de vuelta todo ello por un cómodo asfalto. Decidimos por unanimidad hacer un desvío al la ruta principal y dirigirnos así hacia el área de servicio de la N-1 de La brújula, situada en la parte mas alta del puerto de montaña con el mismo nombre. Al caliente siempre es reconfortante para días como hoy.

Retomamos nuestra andadura con la intención de coger la vía itálica, por la que ya hemos rodado en varias ocasiones pero para ello vamos durante algún kilómetros por la carretera extremando la precaución y siempre lo mas ceñidos a nuestra derecha. Una vez cogido el desvío es armarse de paciencia que aunque no queda mucho el aire sigue haciendo de las suyas y mas ahora que el cansancio comienza hacer mella en todos. No sin sufrimiento llegamos al campo de golf de Riocerezo donde nos dirigimos hacia Burgos ya en un terreno mas favorable ya que es descendente. Pasados unos minutos llegamos a Villimar donde tras las despedidas nos dividimos en 2 grupos acordes con el destino de cada uno y es así que me dirijo a lavar la montura y poder dar por finalizada esta ruta, la que se nos ha complicado por momentos y el viento a hecho de las suyas, pero contento por concluirla sin percances ni  caídas.

Fecha:  9 de Noviembre de 2013.
Distancia:  85 km.
Desnivel acumulado subiendo:  1330 metros.
Tiempo empleado:  6,54 min. (incluye paradas).
Dificultad física:  Alta.
Dificultad técnica:  Baja.
Indice IBP:  99 BYC.

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*--ÁLBUM DE FOTOS.

Kdd BTT Velobur (Oña).

Seguimos en el pequeño puente de comienzos del mes de Noviembre donde como colofón final nos hemos apuntado varios compañeros a una kdd que ha organizado una tienda de bicicletas de la ciudad de Burgos. Nuestro amigo y compañero de rutas Diego, gerente de la tienda Velobur e integrante del club ciclista Me Tomo las de Villadiego, de la localidad de Villadiego (Burgos), ha preparado una kdd entre amigos y conocidos con varios integrantes del club ciclista de Oña. Y como no podía ser menos nos hemos apuntado 4 integrantes del grupo.El lugar para quedar se ha dicho que sea en donde está situada la tienda pero nosotros vamos directos hasta Oña ya que no nos vamos a quedar a la comida y en cuanto termines nos volveremos para casa.
Nosotros 4 somos puntuales y preparamos el viaje para desplazarnos hasta Oña. Llegamos a la plaza de la villa donde se comienza a ver y respirar ambiente de mtb. Como ya es costumbre en estos saraos y demás saludamos a mucha gente conocida que han venido con ganas de disfrutar de una buena mañana. Todo el mundo a lo suyo preparando la burra y ultimando todo para que esté en perfectas condiciones. Nos hemos reunido alrededor de unas 28 personas con ganas de bicicleta y tras unas fotos para inmortalizar el momento comenzamos a rodar siendo objeto de miradas por parte de los habitantes de la villa. Nada mas comenzar nos llevan hacia una subida tremenda, la conocemos de la marcha que hubo en el mes de Mayo y sabemos que es dura. En las primeras rampas sufrimos mas de la cuenta, maquinaria no está caliente y las piernas están todavía resentidas de los dos días anteriores. Poco a poco vamos tomando el pulso a la subida y la gente de cabeza se detiene a mitad de subida para reagruparnos unos cuantos. Hora de hacer fotos y charlar con la gente, que hemos venido a pasarlo bien. Retomamos la marcha y seguimos subiendo, el terreno por aquí esta bastante pesado debido a las lluvias caídas en los últimos días. Unas duras rampas al final del todo sobre un manto verde de hierba lo que nos hace retorcernos sobre nuestras bicis, pero al final conseguimos llegar arriba y así detenernos de nuevo para esperar al resto del grupo.
Después de unas risas, fotos y charlar amigablemente con todos, retomamos la ruta. El ritmo es tranquilo y todos los del grupo nos situamos en cabeza. Así llegamos a la conocida "mesa de Oña", donde nos desviamos de la senda principal para hacer un alto en el camino y contemplar el paisaje que tenemos a nuestros pies. Tenemos delante de nosotros todo el valle donde están enclavadas las localidades de Penches y Barcina de los Montes. Después de esperar al grueso del grupo comenzamos un descenso que en los primeros metros se hace complicado pero que según vamos avanzando se hace divertido a la vez que bonito, y es que estamos dentro de un precioso hayedo que con colores del otoño hacen que sea todavía mas mágico. La pendiente por momentos es empinada pero la senda está haciendo las delicias de toda la gente, incluso se oye algún grito de alegría por parte de alguno. Llegamos a un camino donde nos detenemos de nuevo para esperar. El descenso ha sido rápido y se ha ido quedando gente por el camino. Al final los que estamos abajo deciden ponerse en camino, y vamos comenzando a dar pedales después de un rato de espera. Vamos por un camino ancho donde se puede ir conversando en paralelo con los amigos y conocidos hasta que comenzamos a descender, lo que nos llevará hasta las calles de Barcina de los Montes.
Breve parada y la cabeza del grupo se pone en marcha. Se decide continuar siguiendo las instrucciones de dos de los guías de la ruta. El ritmo que se pone es bueno, vamos disfrutando de la ruta en el grupo que se ha formado. Caminos estrechos y sendas hasta que tenemos que cruzar un cable por debajo el cual nos deja en un camino ancho y rodador el cual tras unos minutos a buen ritmo nos lleva a una carretera estrecha y sinuosa. Aquí giramos a la derecha para ir por ella, donde ahora disfrutamos de la velocidad imponiendo un ritmo fuerte lo que nos lleva a llegar a Villanueva de los Montes. Por esta localidad ya hemos pasado en varias ocasiones y el camino por el que seguimos lo hemos hecho pero en sentido contrario. Es donde minutos mas tarde nos desviamos por un sinuoso sendero marcado con sus líneas paralelas y horizontales en rojo y blanco que nos indican que estamos en un GR. Al principio es en sentido ascendente pero de repente se pone cuesta abajo con algún tramo bastante complicado. Un compañero de ruta que va delante de nosotros tiene una caída sin consecuencias graves salvo el golpe que se dio con la piedra donde cayó. Curvas muy cerradas y tramos con mucha piedra hace que la senda sea mas compleja de lo esperado. Pero llegamos abajo de una pieza y contento, porque desconocía por completo este tramo de GR.
De este modo llegamos a una carretera estrecha y de mal asfalto donde nos indican mediante señales que estamos en Cillaperlata. Desde aquí descendemos por ella hasta llegar a pasar por un puente situado por encima de las aguas del río Ebro. Ahora estamos en la N-629 la que nos llevaría a Trespaderne, pero nosotros cogemos el sentido opuesto. El grupo se ha roto por completo y cada uno ya pone el ritmo que mejor le venga hasta llegar a Oña. Nosotros 4 seguimos juntos y vamos rodando por el arcén hasta llegar a el cruce y así coger la N-232. Ceñidos a la derecha vamos rodando y tras pasar unos túneles llegamos a Oña, donde encaramos los últimos metros hasta llegar ala plaza del pueblo donde poco a poco van llegando mas compañeros.
Muchas gracias a Velobur, por esta iniciativa de hacer kdds. A la anterior no pude asistir pero si se hacen mas seguro que voy encantado. Gracias también  a la gente del club Me tomo las de Villadiego por el trato recibido y por estar pendientes de todo el mundo, y gracias a los integrantes del club ciclista Oña por ir marcando el camino y así enseñarnos un poco mas de la zona.

Fecha:  3 de Noviembre de 2013.
Distancia:  46 km.
Desnivel acumulado subiendo:  1075 metros.
Tiempo empleado:  4,25 min. (incluye paradas).
Dificultad física:  Media-alta.
Dificultad técnica:  Media.
Indice IBP:  82 BYC.

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*--ÁLBUM DE FOTOS DE LA RUTA.

Senda de la Muñeca - Casa de los Ingenieros

Ya terminado el circuito provincial, y a las puertas de un fin de semana de 3 días, me pongo en marcha para preparar una ruta que deje buen sabor de boca a los compañeros y mas si cabe a aquellos que nunca han llegado a subir a la conocida, sobre todo en mis rutas, cima del Trigaza. La ruta va tomando forma y es que estamos a últimos de año y estamos a tope de energías, pero el día elegido para la ruta es el 1 de Noviembre, día de Todos los Santos, en el que por varios motivos esta vez el número es bastante reducido a lo que venimos acostumbrados. En un principio íbamos a ser 4 personas, pero nuestro amigo Richard se nos apuntó a última hora, y es que se acerca el invierno y en la montaña las bajas temperaturas, la nieve y el frío hacen que durante los meses de invierno no pisemos mucho ciertas zonas.

La hora de quedar, como siempre temprano. Somos un grupo que nos gusta aprovechar todos los minutos posibles del día y mas para este tipo de rutas y ya con el horario de invierno, mas a mi favor para el madrugón. Así que hemos quedado en el sitio habitual a las 8 de la mañana para meter las bicis en los coches y preparar el viaje. Esta vez voy de copiloto y voy viendo el lugar hacia donde nos dirigimos, mi preferido con mucha diferencia, y es que tengo algún amigo que ya me llama "El señor de la Demanda", lo dice por las veces que voy a ella a lo largo del año, pero se que lo dice con carió. Veo que la montaña está despejada y es una buena señal. El viaje como siempre muy ameno charlando de todo un poco. Aparcamos los vehículos en la pequeña plaza del pueblo. Hoy tomaremos salida desde la localidad de Santa Cruz del Valle Urbión. La temperatura no es demasiado baja, pero el día está bastante cubierto y eso hace que no hagamos mas que mirar hacia el cielo para terminar de decidirnos que ropa llevar. Una vez concluido con todo nos hacemos la foto de rigor y comenzamos nuestra andadura.
Son exactamente las 9 de la mañana, y 5 locos comenzamos a dar pedales. Nos dirigimos hacia la carretera que va a Pradoluengo, pero sin dejar la montaña. Al principio vamos por un buen camino y pronto se torna una verde pradera con bastante agua que hace que la bicicleta la cueste avanzar. Llegamos a un punto que no sabemos por donde dirigirnos, pronto empezamos!! La verdad que estoy siguiendo el track de una ruta descargada de un usuario de wikiloc. Mantenemos la calma que acabamos de empezar y pronto con un poco de sentido de la orientación llegamos a un camino cerca de un arroyo. Pronto la normalidad vuelve a nosotros y llegamos a una área recreativa perteneciente al término municipal de Pradoluengo a la que llaman El Pinar.
Tras unas fotos en el curioso monolito de piedras continuamos la marcha. Comenzamos a subir. Que no se nos olvide por un momento donde nos encontramos, estamos en el corazón de la sierra de la demanda. Seguimos ascendiendo y llegamos a una zona en la que nos es familiar, y varios de nosotros nos viene a la mente la marcha de este verano de Pradoluengo, en la que participamos. 

Después de unas rampas duras, abandonamos la subida para adentrarnos en un bonito pinar y comenzar un descenso rápido. Vamos avisando del peligro añadido que tiene la bajada, y es que, hay pasos de agua que cruzan el camino a lo ancho y hay que tener mucho cuidado con ellos para evitar salir por los aires. Así llegamos a la altura de una caseta, donde vemos varios coches aparcados. Nosotros giramos a la derecha y de nuevo comenzamos a subir. Los primeros metros del camino lo han intentado hacer mas ancho, pero se les ha olvidado quitar todos los palos que han ido dejando a lo largo del camino, y en varias ocasiones tuve que parar porque se metían los dichosos palos en las ruedas y en los cambios de la bici. Nos adentramos en un hayedo precioso, los colores del otoño hacen que sea ahora cuando mas bonitas están. El suelo está bastante pesado, ha llovido horas atrás y poco sol entra entre las densas hayas. Vamos viendo a bastante seteros buscando ese manjar tan solicitado. Salimos de entre las hayas y nos encontramos un pequeño cortafuegos, que todos intentamos subir hasta donde pudimos, pero claro, las rampas son durisimas y toca hace empujabike, una modalidad que no a todos nos gusta hacer. De nuevo montados llegamos con bastante esfuerzo a arriba.
Al levantar la cabeza vemos que el cortafuegos se empina mas de la cuenta, pero la alegría nos invade cuando vemos que nos tenemos que desviar hacía la derecha en la que a escasos metros de nosotros nos encontramos con una cartel que nos indica que entramos en la Senda de la Muñeca, el que es el primer objetivo de la ruta. Nos ponemos en fila de a uno para dar comienzo a los primeros metros de la senda. Estamos entre pinos, una zona técnica y con alguna piedra da paso a un manto de hojas secas en el suelo. Nos encontramos de nuevo en un hayedo, en el que son igual de bonitos que traicioneros. Suelen venir acompañados de agujeros que no se ven por las hojas secas, zonas blandas donde se hunde la rueda, tocones de madera o piedras puestas en medio a mala leche, en definitiva, trampas que te hace peligrar tu equilibrio encima de la bici. La zona es técnica, y para el que no tenga mucha es una zona de especial sufrimiento. Vas es constante tensión porque estas yendo por la falda de la montaña y al mínimo error vas al suelo. Muchas fotos y risas se van sucediendo y es que a todos sin excepción les está gustando. Después de disfrutar en la senda como enanos, unos mas que otros, salimos de ella para volver a entrar en otra senda. Esta nos lleva a pasar por la fuente de la Berrungaña, un pequeño manantial por donde brota el agua. Vemos un grupo numeroso de seteros a los que saludamos y seguimos nuestro camino. Otra vez nos encontramos rodeados de pinos, y es que el paisaje y lo que nos rodea a cambiado por completo en cuestión de metros. Salimos de entre ellos y en una pequeña bajada nuestro compañero Richard tiene un problema mecánico al que ayudo. La cosa no es grave pero si le va a perjudicar a la hora de disfrutar de la ruta y es que ha perdido el pasador de las pinzas de freno y por consiguiente va sin frenos. Nuestro viaje continua y así llegamos a el Alto de la Cabeza marcado con un punto geodésico. Comenzamos a descender siempre con precaución y de nuevo divisamos a otros seteros. Poco después volvemos a tener ese problema de orientación que nos produjo el track del gps al comienzo de la ruta, y es que aquí nos vuelve a pasar y decido guiarme de los mapas del gps para llegar al camino señalado, el cual nos lleva de nuevo a Santa Cruz del Valle Urbión, localidad de la que hemos salido. 
Después de una breve parada en los coches donde reponemos agua en la fuente y demás, retomamos nuestro viaje alejándonos del pueblo otra vez hacia nuestro siguiente objetivo, el pico Trigaza. Vamos rodando cómodamente por una pista de buen firme hasta que nos desviamos siguiendo las marcas rojas y blancas que nos indican que estamos en un GR. De nuevo comenzamos a subir. Al principio vamos todos juntos pero pronto se empiezan a notar las diferencias de quien está mejor y de quien va guardando. La zona me la conozco y se que es dura, todavía nos queda mucho por subir y es aquí cuando decido poner un ritmo de subida tranquilo y siempre contemplando lo que tengo a  mi alrededor. Bellas vistas y un entorno privilegiado hace que el sufrimiento por estar subiendo se me vaya de la cabeza y solo me preocupe disfrutar. Vamos ganando metros de altitud y las piernas van notando cansancio hasta que llegamos a una pequeña bajada donde poder coger aire. Recordamos a varios compañeros uno de los últimos pasos por aquí donde había saltos de agua por todos los sitios. Pero la alegría dura poco y es que volvemos a retomar la subida. Pronto comenzamos a notar un leve aire que por momentos se hace fuerte. Llegamos al camino asfaltado que sube desde Alarcia y seguimos subiendo. El aire se hace mas fuerte, nos cuesta hasta mantener el equilibrio encima de nuestras bicis y la temperatura está bajando por momentos. 
A duras penas llegamos a la casa de los ingenieros, donde hay una casa de construcción de piedra a la que no se puede acceder y varias antenas de telecomunicaciones. Nos resguardamos en el pequeño refugio de montañero que hay accesible para así comer algo. El frío hace mella en cada uno de nosotros, nos hemos dado cuenta de que en la cima del Trigaza hay una niebla muy densa, la cual hará que las temperaturas bajen aún mas todavía que donde nos encontramos. Al final se decide cancelar la ruta programada por las inclemencias del tiempo a las que hay que añadir la lluvia que comienza a caer donde nos encontramos. Sabemos que si seguimos hacia adelante lo pasaremos mal encima de la bici, por el fortísimo aire que corre, el agua, el frío y la niebla, y por mucho rabia que nos entre por la cancelación sabemos que una retirada a tiempo no es una derrota. Esta vez la montaña a podido con nosotros pero lo único que ha conseguido es que tengamos todavía mas ganas de volver.
Después de terminar de comer al abrigaño del refugio, nos ponemos algo de ropa para el descenso, se ha decidido igualmente por votación el bajar por el camino asfaltado hasta la carretera y continuar por ella hasta Santa Cruz. Cuando salimos a la calle el aire nos lleva, es casi imposible mantenernos de pie sin que nos desplace varios metros. Unas fotos rápidas y no esperamos mas comenzamos a bajar. Alcanzamos una velocidad muy alta pero hay que extremar la precaución ya que se ven muchos coches y quien sabe lo que nos podemos encontrar en el descenso. Con rapidez llegamos a la carretera y tras una breve parada ponemos rumbo por ella hacia Valmala. Minutos mas tarde y tras un rápido descenso llegamos a la plaza de Santa Cruz donde tenemos nuestros vehículos aparcados. Aquí no llueve y la temperatura es bastante mas agradable que de donde venimos, a sido un golpe duro para el grupo pero hemos hecho lo correcto. Se la tenemos guardada para otra ocasión, por mi parte iba a ver sido la cuarta ascensión este año al Trigaza y no ha podido ser. Después de cambiarnos de ropa nos dirigimos a tomar algo caliente al bar que nos lo hemos ganado. Nuestro objetivo no se ha cumplido pero podemos estar contentos de la pedazo de ruta que nos ha salido igualmente. 
Bueno tengo que agradecer a todos mis compañeros y amigos de su grata compañía, sin ellos no podría hacer estas locuras que me dan, y es que la ruta como otras muchas ha sido cosa mía pero sin ellos no sería capaz de hacerlas, así que por ello muchas gracias a todos por acompañarme y prometo que seguiré maquinando nuevas rutas para el deleite de todos.

Fecha:  1 de Noviembre de 2013.
Distancia:  49 km.
Desnivel acumulado subiendo:  1865 metros.
Tiempo empleado:  6,10 min.(incluye paradas).
Dificultad física:  Alta.
Dificultad técnica:  Media - Alta.
Indice IBP:  155 BYC.

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Marcha BTT Covarrubias 2013

Llegamos a este punto en el que el circuito provincial de Burgos llega a su fin. La marcha de Covarrubias es la única del circuito con dos pruebas diferentes en dos días. El sábado se disputa una contrarreloj y el Domingo la marcha oficial. Lleva años siendo también la que da cierre al provincial de Burgos. La semana se acerca y comienzan las lluvias. Unas lluvias que acompañan a lo largo de casi toda la semana dando una pequeña tregua el día de antes al evento. Por distintas redes sociales donde nos encontramos solo leemos comentarios de miedo sería poco, sino de terror al dichoso barro. Somos conocedores de la zona por distintas visitas y sabemos que el entorno del Arlanza, río que atraviesa esta bonita villa, es muy empedrado y seco. La tierra filtra muy bien el agua y nosotros lo sabemos bien, ya que durante el invierno visitamos esta zona con frecuencia por ese mismo motivo.
Llega el día y nos juntamos 15 amigos del grupo dispuestos a pasarlo bien y disfrutar del cierre del circuito. Tengo que desplazarme solo hasta Covarrubias porque me han surgido algún problema personal y nada mas terminar la marcha he de marcharme, con la pena de no poder acompañar a los amigos en la comida que se había organizado, pero así es la vida. Aparcamos los vehículos y nos disponemos a ir a recoger el dorsal. La mañana es bastante fría, estamos a últimos de Octubre y en Burgos ya se sabe que desde estas fechas hace cada vez mas frío. El cielo está completamente despejado pero la temperatura es baja, aún así vemos auténticos valientes que desafían las bajas temperaturas yendo con ropa de verano.
Nos acercamos para tomar posiciones, la hora de salida se acerca, la que dará lugar a esta última prueba de btt. En la gente se ve el nerviosismo y por mi parte la prudencia, todavía me acuerdo de la marcha del año pasado, la que me cazó el tío del mazo y estuve a punto de tirar la bici al Arlanza. Así que este año iban a cambiar las cosas o ese es el objetivo que me he propuesto. A las 9,30 horas dan la salida y como siempre todo el mundo a fuego. Vamos rodando por las calles de esta preciosa villa con tanto encanto y así cruzamos el río por el puente para desviarnos y tener contacto que la tierra. Vemos autenticas liebres adelantarnos, ¿tendrán prisa?... posiblemente si. He perdido todo contacto visual con mis compañeros, ni por delante ni por detrás. Voy cogiendo calor en las piernas que falta me hace. Las noto duras y un poco cansadas, espero que según vayan avanzando los kilómetros vayan espabilando un poco, ya que el día de antes salí a rodar un poco por carretera y me salieron casi los 100 kilómetros. Ahora entiendo porque mis amigos y compañeros  del  Burgos MTB me llaman "animal". Lo que pasa que no hay que darles la razón nunca para así sentirse uno mejor consigo mismo. Pero gracias chicos lo tengo en cuenta en cada ruta que hago en las que como siempre se os echa de menos.
Pronto comienzan los pequeños problemas, tras desaparecer por completo el camino ancho y rápido nos adentramos en una senda en sentido ascendente donde en los primeros metros vemos un pequeño embotellamiento. En fila de a uno comenzamos a subir, pero vienen por detrás achuchando y queriendo pasar por donde no caben. Los nervios por parte de los que nos hemos juntado se calman y vamos adelantando a gente por donde se puede y a muchos de ellos saludando que los conocemos. Terminada la subida salimos a un camino y toca hacer parada técnica a mear que ya no aguanto mas.  Pocos metros mas adelante un descenso divertido pero un tanto complicado ya que el terreno está bastante duro pero a la vez en algún tramo resbaladizo. En el tramo anterior me he juntado a mi compañero de grupo Juan Carlos. Juntos comenzamos a ascender el siguiente escollo de la marcha. Una subida dura donde tenemos que sacar todo lo mejor de cada uno. Comienza es arriba del todo cuando me doy cuenta que subo solo y decido volver a coger mi ritmo. Metros mas adelante tenemos el primer avituallamiento donde decido no parar ya que voy servido de todo.
Seguidamente nos adentramos en una descenso bastante complicado donde varios corredores se han parado y entorpecen a los que bajamos mas metros montados, yo también tuve que desmontar. A continuación llegamos a la pequeña localidad de Ura donde nos adentramos por el bonito y conocido cañón del río Mataviejas. Un sendero revirado que hace las delicias de todos. Así y sin darnos cuenta pasamos por las calles de Castroceniza, donde de nuevo todo se pone cuesta arriba. Empieza una ascensión por la que ya he pasado en alguna ocasión y ya la conozco así que decido poner ritmo cómodo al principio, lugar de la mayor pendiente. Poco a poco voy subiendo el ritmo y a la vez voy cogiendo a compañeros que se les está atragantando un poco la ascensión. En solitario llego arriba donde comienzo a pistear. Este tramo será el único de la ruta con agua y algo de barro. Salgo de la pista y me adentro en una bajada por senda divertida y rápida que en minutos me hace coger velocidad para llegar así a las calles de la localidad de Retuerta donde nos espera un numeroso grupo de personas gritando y el segundo avituallamiento de la prueba.
De nuevo paso de largo sin detenerme, no me quiero quedar frío y continuo hacia adelante. De nuevo volvemos a subir. Me he juntado con varios corredores que cada uno va a su ritmo. Y tras una primera rampa dura, el camino se suaviza sin dejar de subir. Breve descenso por una bonita senda y de nuevo se pone cuesta arriba. La gente comienza a flaquear, y los que me adelantaron kilómetros atrás están cayendo como moscas. Esto me trae recuerdos no muy buenos de la marcha del año anterior donde sufrí bastante. Después de subir ya otra vez en solitario comienzo una bajada por pista rápida, donde se alcanza la velocidad mas alta de la ruta y es que el camino en perfectas condiciones te anima a dar pedales para comer metros con rapidez. Me desvío del camino y entramos en una zona preciosa pero sin olvidar su dureza y en algún momento dificultad técnica, ya que vamos a escasos metros del Arlanza y un error de calculo puede llevarnos al agua. Salvado esta zona nos adentramos en una chopera a escasos metros de Retuerta. Este tramo es lo único que ha variado de la marcha del pasado año. Pero nos lleva al mismo lugar, a la última subida del día donde de nuevo una vez mas vamos viendo a gente desfallecida por completo que sube como puede. La verdad que después de todo el tute que llevamos es lo mas lógico, pero como digo la tenía ganas a esta marcha por hacerla con cabeza. Una vez arriba comienzo un descenso donde de nuevo adelanto a varios corredores y es así cuando vuelvo a pasar por el puente sobre el río donde hacemos un giro y comenzamos a subir por la calle empedrada donde está la colegiata de Covarrubias y a escasos metros y sin dejar de dar pedales hasta el último momento pasar por el arco de meta.

GRACIAS A LA GENTE DEL CLUB DEL BARRO POR LAS FOTOS

Bueno, este año he podido disfrutar de la ruta dado que como ya he dicho el año anterior estuve a punto de tirar la bici al río. Que pajarón me entró. El terreno en algún tramo estaba muy pesado, no había barro, pero estaba tan mojado que la rueda parecía que estaba pegada en algún tramo. Si que es cierto y a mi modo de ver las cosas, que se echó de menos a mas gente de la organización en algún tramo mas de la marcha pero bueno cada uno ya tiene bastante. Como he dicho al principio de la entrada nada mas terminar la marcha tuve que salir corriendo de Covarrubias y no puede disfrutar del ambiente, pero seguro que fue de fiesta. Solo me queda decir, hasta el año que viene.

Fecha:  27 de Octubre de 2013.
Distancia:  47 km.
Desnivel acumulado subiendo:  995 metros.
Tiempo empleado:  2,54 min. (incluye paradas).
Dificultad física:  Media - alta.
Dificultad técnica:  Media.
Indice IBP:  75 BYC.

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