jueves, 18 de julio de 2013

Trigaza, San Millán y Mencilla

Llevaba un par de años pensando en esta ruta, y la quise haber hecho el año pasado pero cuando me levanté por la mañana para hacerla, llovía demasiado así que la oportunidad se perdió. Luego pensando en poder hacerla en primavera cuando las temperaturas no fueran demasiado elevadas también tuve que desechar la idea por una primavera un tanto revuelta en lo que al clima se refiere, ya que se podía ver que todavía persistía en algún lugar la nieva, la cual nos dificultaría bastante la ruta programada. La idea la pospongo hasta mi semana de vacaciones, donde sin más cancelaciones me dispongo hacerla solo o acompañado el martes. Antes de realizar la ruta, y como siempre, se lo comento a mis compañeros, donde al ser día laboral pues nadie me puede acompañar a excepción de mi inseparable, compañero y amigo de fatigas, Fernan, el cual se anima a venir conmigo a esta descabellada ruta que mi brillante cabeza se le ha ocurrido.
Suena el despertador a las 6 de la mañana, y estando de vacaciones da mucha pereza levantarse a estas horas, lo reconozco. Pronto me pongo en marcha para ultimar todo lo necesario para el viaje y a la hora acordada mi compañero ya me está esperando en el punto de encuentro. Nos encaminamos por carretera para ir bordeando los dos pantanos burgaleses que abastecen la ciudad y comarca hasta llegar a la bella localidad serrana de Pineda de la Sierra donde aparcamos el vehículo para comenzar lo que será una ruta larga. Hay que tener una buena alimentación y sobre todo hidratación para rutas de este tipo, sabemos, porque no es la primera vez que venimos por aquí que estaremos muy expuestos al sol y la verdad que tiene pinta de que será un día muy caluroso. Por ello, y aunque pese la camelback, se debe de llevar agua.
Llega la hora de ponerse en marcha. Pasan 10 minutos de las 8 de la mañana, y comenzamos a dar nuestros primeros pedales descendiendo hacia la ermita del Santísimo Cristo situada a pie de vía verde. Cogemos dirección Arlanzón pero pronto nos tenemos que detener, tengo problemas con el desviador trasero y se me hace complicado dar pedales, se salta la cadena. Una breve parada para arreglarlo y de nuevo nos ponemos en marcha. Terreno favorable que hace que se coja una velocidad bastante alta. Pronto comenzamos a ver la cola del pantano de Arlanzón, donde vamos serpenteando como el hasta que nos desviamos para descender a lo que es la presa de dicho pantano. Nos encontramos siguiendo el gr-82, una ruta circular de gran recorrido que rodea y atraviesa de algún modo toda la sierra de la demanda. Sin perder de vista las marcas caracteristicas de los gr, dos marcas horizontales y paralelas, la una de color rojo y la otra de color blanco, nos llevan a rodar algún metro por la carretera. La alegría dura poco, cuando hacemos un giro brusco a la derecha y tras saltar una cadena comenzamos a subir una pendiente bastante dura. Estamos en una zona de pasto, donde vemos ganado vacuno a ambos lados del camino. Sin apenas aire y las temperaturas subiendo considerablemente seguimos nuestro viaje, tenemos delante nuestro un valle el cual seguro que hay que cruzarlo de alguna manera. Comenzamos a escuchar el sonido de un arroyo y nos adentramos en un camino donde la vegetación nos tapa a nosotros casi enteros. Viendo lo que nos espera, el sentido del humor no nos falta y es cuando decido cargar la bici al hombro para poder seguir adelante con nuestro camino. A duras penas conseguimos pasar el arroyo, y tras un pequeño problema de localización nos toca salvar un escollo medio trepando por unas piedras con la bici. Pero todo no queda ahí, tenemos que empezar a subir andando por un cortafuegos, el cual se hace interminable. A modo de critica, no me puedo creer que las cabezas pensantes que hallan diseñado esta ruta de gran recorrido, en la que en su totalidad recorres unos 270 kilómetros, hallan metido un tramo tan malo, duro y casi imposible de salvar. Tengo que decir que si a nosotros nos costó subir, no me imagino subiendo a alguien que venga con su bici y unas alforjas subiendo el cortafuegos. Vamos que seguro que no hay caminos por la zona.

El salvar el valle nos ha supuesto una perdida de algo más de una hora. Una vez subido a duras penas el cortafuegos comenzamos a rodar con más facilidad por caminos entre pinos hasta que llegamos al camino medio asfaltado que sube hacia el Trigaza. La ascensión ya es muy conocida por los dos que vamos ya que la última vez que subimos era abril, pero en esta vez no hay nieve. Nos detenemos a comer algo y contemplar las vista en la casa de los ingenieros. La parada es corta, el tiempo apremia debido al gran retraso que llevamos. Comenzamos a ascender de nuevo, entramos en una zona seca, dura donde la vegetación va desapareciendo. Tras las famosas "zetas" del Trigaza llegamos a la caseta del guarda, donde también se encuentra el punto geodésico y un buzón de montañero. Después de unas fotos, una charla amigable con el guarda y de nuevo comer algo nos ponemos otra vez en marcha. Comienza un tramo muy duro donde hay que ir cresteando para seguir ascendiendo a las otras dos trigazas y llegar así a la más alta con sus 2078 metros de altitud. nos encontramos con una zona muy dura y técnica, hay muchas piedras que parecen cuchillas y hay que meter la rueda por el sitio adecuado. Mucho bache y subidas muy duras que se hacen como se puede, algunas incluso empujando la bici. Nos encontramos con un grupo de senderistas que baja andando, y nos dan todo su apoyo por todo lo que nos queda. Efectivamente nos queda la subida más dura, los últimos metros hasta coronar el techo de Burgos. Una zona muy rota donde es imposible subir encima de la bici. Pero todo esfuerzo tiene su recompensa y es cuando llegamos al caracteristico punto geodésico del pico San Millán situado a 2131 metros de altitud. Desde aquí las vistas son fantásticas. La idea era hacer aquí un alto en el camino y poder comer algo tranquilamente pero la cantidad de insectos voladores nos están amargando el momento y decidimos descender hasta el nacimiento del Arlanzón para así poder reponer agua.
Después de comer e hidratarnos bien continuamos nuestra peculiar cruzada por la demanda. Seguimos descendiendo por un cortafuegos donde hay que tener especial cuidado con la gran cantidad de piedras cortantes que hay. terminado de descender llegamos al puerto del Manquillo situado a 1400 metros, por el que pasa la vía verde de la demanda. Nosotros seguimos recto y de nuevo se pone nuestro camino cuesta arriba. Nos adentramos en un hayedo que nos da cobijo sobre el sol y se agradece mucho, el calor aprieta y el cansancio va haciendo mella en nosotros. Llegamos al punto en el que el camino se acaba, pero tenemos una pequeña senda que sube con una fuerte pendiente entre unas aylagas. Lo más cómodo es subir andando. Una vez enlazado con el camino que hay arriba seguimos rodando por el. Nos espera una serie de vaguadas donde la subidas no son muy duras salvo algún pequeño repecho, claro está en que todo depende de las fuerzas con las que llegues a ellas. Totalmente expuestos al sol más abrasador del día seguimos ascendiendo con el objetivo ya marcado en nuestras retinas. tras unos minutos no sin sufrimiento coronamos nuestra tercera cumbre del día, nos encontramos en el pico Mencilla a 1931 metros de altitud, es el pico más bajo de los 3 en el día de hoy, pero no por ello el más fácil. Breve parada para contemplar lo que tenemos a nuestros pies, donde se ve la estación del Valle del Sol y Pineda de la Sierra.
Después de sacarnos unas fotos en el buzón de montañero y en el punto geodésico emprendemos los últimos kilómetros del día. Desde la cima tenemos nada más arrancar una fuerte pendiente en un estado lamentable donde hay que tener especial cuidado, las fuerzas flaquean y por nada te puedes ir al suelo. Sabemos que por aquí hay una senda que nos lleva directamente hasta Pineda pero exactamente desconocemos donde se coge con exactitud, aunque vemos una senda señalada con mojones de piedra por la que nos aventuramos a descender. Sus primeros metros son buenos pero según vamos avanzando se acumula una gran cantidad de piedras que nos hace desmontar por precaución. Salvado este problema nos adentramos en una senda preciosa, de fuerte pendiente entre pinos, vamos serpenteando al unísono hasta que noto un problema en el freno trasero, me he quedado sin pastillas. Decido bajar todavía más despacio para no abrasar el freno. La verdad que la senda no me la conocía pero es totalmente de mi agrado. Minutos más tarde llegamos a la ermita situada en la vía verde, la cual cogemos su desvío provisional para así encaminar nuestros últimos metros del día.  Ha sido una ruta muy dura, donde el calor nos ha golpeado con toda su fuerza, el sol nos ha abrasado sin compasión, nos hemos dado cuenta que el gr-82 está peor de lo esperado, pero sobre todo con la satisfacción de llegar con el objetivo cumplido, ascender un una misma jornada a las 3 cumbres más míticas y conocidas de la provincia de Burgos. Desde aquí agradecer a mi
compañero Fernan su compañía y embarcarse en esta aventura conmigo que físicamente nos ha dejado a los dos bastante cansados. gracias amigo.

Fecha:  9 de Julio de 2013.
Distancia:  55 km.
Desnivel acumulado subiendo:  2130 metros.
Tiempo empleado:  9,20 min. (incluye paradas).
Dificultad física:  Muy alta.
Dificultad técnica:  Alta.
Indice IBP:  188 MTB.

*--ENLACE A WIKILOC.

*--ÁLBUM DE FOTOS DEL DÍA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario