lunes, 16 de diciembre de 2013

Pineda de la Sierra


Llevo dos años haciendo una ruta larga con salida desde la misma ciudad de Burgos y que me lleva hasta la localidad serrana de Pineda de la Sierra, un pueblo enclavado entre las 3 montañas mas míticas de la provincia de Burgos y más conocidos, me refiero al pico Mencilla, pico Trigaza y al pico San Millán. Durante todo el año he estado pensando en la ruta. En Marzo hice una por carretera y la vía verde, pero no me quede satisfecho con esa ruta ya que se hizo para rodar por la gran cantidad de agua caída. Los meses van pasando y no veo el momento para poder realizarla, y eso que ya tengo en mente por donde va a transcurrir. Se aproxima final de año y el plan de hacer una ruta anual hasta Pineda va desapareciendo de mi cabeza por motivos obvios, las inclemencias del tiempo. Pero mi cabeza loca da un giro al asunto cuando en la pasada ruta, la del escalofrío, propongo durante la comida el hacer esta ruta hasta la bella villa de Pineda de la Sierra. Con una semana de por medio ya hay muchos que se animan a venir y es que es lo que mas me gusta de este grupo que mis ideas descabelladas siempre son respaldadas con la asistencia de mis compañeros.

Llegado el día, ponemos hora para poder ponernos en marcha quedando a las 9 de la mañana en la pasarela de la fuente del prior. La mañana es muy gélida, las bajas temperaturas nos han acompañado durante toda la semana pero eso no nos quita las ganas de una nueva aventura. Ponemos rumbo hacia el barrio de Cortes donde cogemos el camino conocido por todos del destierro del Cid. Empezamos a ganar un poco de altura y así llegamos a las inmediaciones del Monasterio de San Pedro de Cardeña, donde cogemos unas pistas anchas y nos damos cuenta de la presencia del temido acompañante molesto del ciclista ,el viento. Nos golpea de cara haciendo que la sensación térmica sea inferior. Abandonamos en camino del Cid y pronto pasamos cerca de la casa del monte mirando a cada lado ya que sus inquilinos, los canes, son un poco molestos para la gente que paseamos por aquí. Seguimos nuestro viaje por un camino bastante empedrado, estamos rodando por la cañada real, que une Palazuelos de la Sierra con la ciudad de Burgos. El viento sigue haciendo de las suyas pero tenemos una ventaja, que debido a las bajas temperaturas el suelo está completamente helado y no hay barro que nos dificulte el poder rodar cómodamente. Nos vamos acercando a nuestro primer objetivo pero antes hay que salvar cuidadosamente unas grandes placas de hielo en medio del camino, menos mal que hay sendas paralelas que las rodean. Llegamos a una valla donde decidimos no cruzarla con la intención de enlazar a la carretera mediante el cauce de un arroyo, pero al llegar nuestra intención se trunca debido a que baja bastante agua por el arroyo a consecuencia del deshielo de la nieve de las montañas, así que volvemos por nuestros pasos y cruzamos la valla. El miedo que teníamos es que yendo por el robledal de Palazuelos nos adentrásemos en una auténtica trampa de barro como alguna otra ocasión. Pero nada de eso, el suelo está tan congelado que no se hace nada de barro y llenos de alegría por ello llegamos a la fuente de Palazuelos de la Sierra con el primer objetivo de la ruta.

Tras comer un poco y beber retomamos nuestro camino, pero esta vez cambiando el trayecto por el que siempre íbamos, y es que empezamos a subir callejeando por el pueblo. En algunos tramos la pendiente es dura y además hay que sumar que por momentos el camino tiene un manto verde que hace que aún cueste mas si cabe. Pronto enlazamos con la pista que sube y por la que conozco bastante debido a la infinidad de rutas realizadas por aquí. La temperatura ha subido bastante y el dichoso aire a cesado, cosa que nos alegramos mucho ya que en breve saldremos a terreno escarpado sin protección alguna. Vamos ganando altura, por momentos la pendiente se endurece y a la vez vamos contemplando la montaña y las vistas que nos ofrece. Pequeño descenso el cual nos lleva a un fuerte repecho con placas de hielo. Intentamos subir pero no tenemos éxito, patinazos y como consecuencia de ellos toca echar pie a tierra. Como podemos y debido a que ya empieza haber con mas frecuencia hielo y nieve llegamos al pico Torruco, marcado así con un punto geodésico donde nos detenemos para sacar alguna foto y comer un poco.
Estamos animados, el día que nos ha salido pese a las bajas temperaturas iniciales es esplendido. Las vistas con un cielo claro son magistrales y nuestro camino continua. Delante nuestro tenemos una vaguada, una de las tantas que hay hasta que coronas el pico Mencilla, el que se antepone ante nosotros cubierto de nieve. De nuevo volvemos a subir. Aprovechamos unas roderas que hay de un todo terreno que a lo largo de la subida hemos ido viendo sus huellas. Las placas de hielo cada vez son mas presentes y hay que tener sumo cuidado de no caer al suelo. La velocidad no es fuerte, pero el golpe te lo llevas igualmente. Tras una subida complicada comenzamos una bajada mas difícil todavía. La nieve va ganando espesor y el hielo cada vez es mas resbaladizo el cual hace que la bajada sea con mucho temple y cuidado. Todos de una pieza de nuevo otra vez a subir, pero las roderas del coche que nos han ido acompañando hasta aquí vemos que se dan la vuelta e intentamos subir sin ellas pero es una tarea imposible ya que parecemos quitanieves y el espesor de la nieve hace que nos hundamos. Así que toca echar pie a tierra y hacer lo que se denomina "empujabike". Llegamos a un descanso donde vemos que la ruta original gira hacia la izquierda. A lo largo de la subida se barajó la posibilidad de ir mas allá y bajar por el esteralvo, pero la idea la desechamos en cuanto vimos lo que nos íbamos a encontrar, que es una gran cantidad de nieve virgen y hielo en donde dar pedales sería imposible. 

Después de unas fotos y sobre todo unas risas comenzamos lo que sería una bajada divertida y rápida, pero la cosa se truncó en cuanto nos adentramos en el camino. La nieve no estaba helada y nos hundíamos casi hasta la rodilla. De nuevo toca hacer "empujabike", todos en fila de a uno siguiendo las huellas del primero. Nos encontramos entre pinos y esto ha hecho que la nieve se proteja de las bajas temperaturas. Poco a poco vamos andando hasta que llegamos a lo que es un cortafuegos, donde vemos unas huellas de un quad, las que aprovechamos para ir descendiendo despacio y con buena letra. Una vez abajo, nos desviamos cosa de 150 metros para acercarnos a un mirador y contemplar así el bello paisaje hasta donde den nuestros ojos. Minutos mas tarde volvemos por nuestros pasos para desviamos hacia la izquierda y comenzar un descenso. Al principio helado y con nieve, pero según vamos comiendo metros esta va desapareciendo y llega el temido barro producido por el deshielo. En una pequeña placa de hielo nuestro amigo Richard sale disparado de su montura cayendo contra el duro suelo con pocas consecuencias salvo un pequeño golpe. Así con mucho cuidado y ya manchados del todo llegamos a la vía verde donde cogemos rumbo a nuestro objetivo principal en la ruta de hoy. Minutos mas tarde hacemos acto de presencia por las calles de Pineda de la Sierra donde vamos a parar en la cantina del pueblo para hacer el avituallamiento.
Con las pilas cargadas ponemos direccióna a  nuestro punto de partida por la vía verde. El ritmo es tranquilo pero comiendo kilómetros sin cesar. vamos viendo gente que se ha animado a disfrutar del día que ha salido aunque en las proximidades del pantano la humedad y el frío se note mas. De nuevo desechamos la idea original que era desviarnos hacia Urrez cogiendo el camino que sale en lo que denominamos el pequeño manquillo, el cual a lo largo de los meses de verano lo han acondicionado echando una capa de hormigón rugoso y rayado para evitar caídas. Sin dejar de dar pedales con el terreno favorable llegamos a la depuradora de Arlanzón donde decidimos girar hacia la izquierda para evitar así la carretera. Una pequeña subida y llegamos a un pinar el cual nos lleva de nuevo a enlazar con la ruta que había diseñado y la que nos hacía pasar por Brieva. Desde aquí y a un buen ritmo nos acercamos hasta el campo de fútbol de Monzoncillo donde poco después y tras una bajada por una senda divertida nos lleva a la carretera. Ya en terreno llano llegamos a San Millán de Juarros donde cogemos el camino interminable, ese que tiene muchos agujeros y un firme bastante incomodo el que nos lleva hasta San Medel. Así nos vamos acercando a la ciudad por el camino del río hasta que llegamos a La Ventilla donde nos dirigimos a lavar nuestras bicis y dar así por concluida esta ruta. 
Solo me queda dar las gracias a mis 3 valientes amigos y compañeros, con lo que sin ellos no habría sido posible esta ruta, la última larga del año. Hemos sufrido y la vez nos hemos divertido pero sobre todo me quedo con haber podido disfrutar de estos kilómetros en la compañía de ellos. Gracias por seguirme y hace que mis locuras se hagan realidad. Así da gusto!!, pero que sepáis que ya tengo la próxima locura en mente, ahí lo dejo todo.





Fecha:  6 de Diciembre de 2013.
Distancia:  92 km.
Desnivel acumulado subiendo:  1255 metros.
Tiempo empleado:  9,24 min. (incluye paradas).
Dificultad física:  Alta.
Dificultad técnica:  Media-alta.

Indice IBP:  126 BYC.

*--ENLACE A WIKILOC.

*--ÁLBUM DE FOTOS.

4 comentarios:

  1. Como bien dijiste tu ,quien esta mas loco el que lo propone o los que te seguimos. Sabes que siempre es un placer rodar contigo. Gracias a ti compañero y también a Fernan y a Richard.

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    1. Yo me considero un loco, pero me reitero en lo que dices, no está mas loco el que lo hace, sino el que le siguen.
      El placer es mio Luis.
      Gracias.

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  2. Carlo Dossi, escritor italiano dijo: los locos abren los caminos que más tarde recorren los sabios. ¡Qué pasada de ruta! Por cierto, has nombrado en algunas de tus crónicas que hay una zona donde salen perros. Ya sabes que ir con niños, la cosa se podría complicar. Si me puedes indicar dónde es ese lugar, te lo agradecería. Gracias.
    Un saludo.

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    1. La zona a la que hago referencia David, está siguiendo las pistas que hay por encima del monasterio San Pedro de Cardeña. Es una zona vallada donde hay ovejas. La verdad que en algunas ocasiones hemos tenido algún susto con esos perros.

      Gracias por pasarte por mi rincón.

      Un saludo amigo.

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